
Be the example
Hoy no iba a escribir en el blog. Nadie me obliga a hacerlo, pero «necesito» hacerlo. Ya sé que no os interesa para nada mi vida personal, pero a veces pasan cosas que pueden servir de ejemplo para explicar mi trabajo con los atletas.
Cuando empecé con el nuevo blog no quise que me pasara como con el anterior, en el que esperaba a la inspiración para publicar cualquier cosa.
Me comprometí a escribir un post todos los lunes, miércoles y viernes, y eso es lo que voy a hacer aunque no me apetezca, aunque tenga sueño, aunque me duela la cabeza o me tenga que levantar a las 5:00am.
Hacer lo que no nos apetece es lo que se llama disciplina.
En mi stage en USA con Wynn Gmitrosky aprendí una cosa muy importante. Wynn es un tipo serio, muy respetado y, para mí, inspirador.
En una de nuestras conversaciones hubo una frase que quedó marcada a fuego en mi cabeza: Be the example.
Aquello ha supuesto en mí un cambio de mentalidad y de forma de hacer muy grande, porque precisamente yo jamás he sido ejemplo de nada.
El fondo que esconde esta frase es que como entrenadores no podemos esperar nada de nuestros atletas si nosotros mismos no lo hacemos.
Nuestra credibilidad nos la ganamos dando ejemplo. Evidentemente, como entrenadores no tenemos que correr y competir, pero nuestra filosofía de trabajo debe ser paralela a la del atleta.
No podemos exigir disciplina, esfuerzo y sacrificio si nosotros no demostramos eso cada día.
No podemos exigir puntualidad si nosotros no la tenemos.
No podemos pedirles que den su vida por el atletismo si nosotros no lo hacemos.
No podemos transmitirles el juego limpio si nosotros somos unos canallas.
Por nuestra condición humana, todos tenemos defectos, pero no podemos autocompadecernos sino esforzarnos para cambiarlos.
«Lead the change» me dijo Wynn. Lead the change, allí sentado en el asiento del copiloto de su coche, volviendo de un entrenamiento en la Northern Arizona University, todavía resuena en mi cabeza.
Y ese día decidí que iba a empezar el cambio por mí mismo, y que intentaría enseñar a mis atletas todo lo que puediese con mi propio ejemplo.
Y no es fácil, porque cambiar uno mismo es lo más complicado del mundo. Pero aquí me tenéis, a las 6:33am terminando mi post.
Este es mi particular maratón y, tenga o no cosas que decir, aquí me vais a tener haciendo el «pesao» tres días a la semana.
Si tengo tiempo hablaré de entrenamiento, si no lo tengo, hablaré de «mis cosas».
6 respuestas a «Be the example»
[…] en favor de sus objetivos. Porque si hay algo que da credibilidad a las palabras es dar ejemplo. “Be the example” me dijo mi maestro Wynn Gmistrosky. Y es que para mí el ejemplo es uno de los valores más […]
Ole ahí esos usos correctos de «sino vs. si no». Proud of you! 😉 Ahora, lo del «choche» me ha descolocado un poco. Es lo que tiene escribir tan temprano!! LOL
Por otro lado, qué razón tiene este señor. Aquí en Alemania también esa idea de dar ejemplo (Vorbild sein) ha calado mucho en la sociedad. Es una gran responsabilidad, pero la mejor forma de ganarse respeto. Algo bastante diferente al «haz lo que yo diga, pero no lo que yo haga» tan propio de nuestra cultura.
Un abrazo.
Gracias Ana! Aunque no sé si llegaré nunca a la perfección ortográfica, siempre viene bien tener la «presión» cerca, jejeje!
Y de acuerdo con tu comentario, aquí cuando te comportas de manera ejemplar te tachan antes de tonto que de otra cosa. Sólo exigimos ejemplaridad a los demás.
Un abrazo!
Pues yo difiero en lo q dices. Te conozco desde antes d irte a Arizona y ya eras un ejemplo para nosotros tus atletas. Ya solo con tu actitud, conocimientos , predisposicion y la posterior disposicion lo eras. Aun asi siempre es importante ver nuestros errores y aceptar q necesitamos cambiar ciertas cosas. Este tipo de post son interesantes para conocer el trabajo de un entrenador. Somos muy impacientes y queremos nuestros planes y cualquier cosa siempre para ayer y a veces no nos damos cuenta del trabajo q supone preparar algo con detalle individualmente.
Hola Rafa! Aunque intento tener siempre a todo el mundo bien atendido, sí que es cierto que muchas veces cuesta llevar todos los detalles al día, a veces cometemos (en mí es bastante frecuente) el error de abarcar más cosas de las que podemos. Pero cuando se adquiere un compromiso, no valen excusas, hay que cumplirlo y por eso hay que dar el 100% cada minuto.
Un saludo y espero poder visitaros un día de estos, aunque visto el ritmo que llevo… ¡Un abrazo amigo!
Pues Vicen, se agradece lo más grande tu disciplina porque gracias a ella muchos aprendemos de ella y bebemos de tu aporte. Estoy al 100% de acuerdo contigo en este post. Gracias por ir poniendo esas piedrecitas en el camino que nos ayuda a muchos a volver a la casa de la sensatez y dejarnos de sandeces.
También gracias a vosotros por los comentarios, siempre es una motivación extra saber que al otro lado de la pantalla hay gente dispuesta a leer y compartir.
Un saludo!