Seleccionar página
Derribando mitos sobre el lactato

por | 20 Sep 2013 | Entrenamiento | 3 Comentarios

«Pues habrá que hacer un test de lactatos a ver…» ¿Qué atleta de resistencia no ha oído algo así alguna vez de su entrenador?

El lactato, de alguna manera u otra, forma parte de la vida de todo corredor y no son pocos los que mantienen una relación de amor-odio con esta sustancia, tan famosa y a la vez tan desconocida. Todos hemos oído hablar de él… y más de uno no tiene muy buena opinión ¿Pero sabemos lo que es?

Pues bien, el lactato no es más que 2-hidroxipropionato (C3H5O3), o lo que es lo mismo un anión orgánico derivado de la disociación del ácido láctico (No nos hemos enterado, ¿A que no?). Como el objetivo de este texto no es más que hacer una introducción al lactato… no entraremos en la bioquímica nada más que para recalcar que debido al bajo pK (3.86) de la enzima lactato-deshidrogenasa (que es la que produce ácido láctico a partir de ácido pirúvico al final de la glucolisis) y teniendo en cuenta el pH fisiológico humano (en torno a 7.35), el ácido láctico se encuentra prácticamente disociado al 100% (recalco, 100%) en lactato y en un protón o hidrogenión (H+) en el organismo. Por eso, cuando oigáis a alguien decir puede sentir el ácido láctico, dadle una colleja, en todo caso será lactato (y ni eso, ¡El lactato no produce fatiga! Ya lo comentaremos otro día).

En fin, al lío. Primero vamos a desmontar unos cuantos mitos:

Mito: Tradicionalmente se ha pensado que el lactato no es más que un mero producto de desecho, un veneno, resultante de la ausencia de oxígeno…

Realidad: Actualmente se sabe que existe producción de lactato en músculo plenamente oxigenado tanto in vivo como in vitro (Jobsis & Stainsby, 1968; Brooks, 1986; Connett et al, 1986), y de hecho las concentraciones sanguíneas de lactato en reposo son del orden del 0.6-2 mmol·L-1)

Además, hoy en día se considera al lactato como un importante precursor gluconeogénico para el hígado (Cori & Cori, 1929; Stallknecht et al, 1998), un substrato oxidativo para el músculo esquelético y cardíaco (Stanley et al, 1986; Gertz et al, 1988; Bergman et al, 2000), así como un importante factor a la hora de mantener la homeostasis de la glucosa durante el ejercicio (Donovan & Brooks, 1983; Turcotte & Brooks, 1990; Miller et al, 2002). De hecho se estima que el lactato podría representar un 25% de la oxidación de los carbohidratos (Bergman et al, 1999) y entre un 60-80% de la gluconeogénesis durante el ejercicio (Depocas et al, 1969; Donovan & Pagliassotti, 1989). Casi nada oiga.

¿Acaba aquí la cosa? Pues no, también se sabe que el lactato es el principal substrato energético de diferentes órganos y tejidos en reposo o durante el ejercicio (Gertz et al, 1988; Stainsby & Brooks, 1990; Gladden, 2000; Bergman et al, 2000), como por ejemplo el cerebro (Brooks, 2002; Dalsgaard et al, 2004a,b; Dienel, 2004), piel e intestino (Johnson & Fusaro, 1972), riñón (Leal-Pinto et al, 1973; Brand et al, 1974; Yudkin & Cohen, 1975; Bellomo, 2002) o incluso músculos no activos que utilizan lactato procedente de otro músculo activo (Carlson & Pernow, 1959; Ahlborg et al, 1975).

¿Y todo esto qué más nos da? Pues bueno, habrá primero que quitarle el «muerto» de enemigo del atleta antes de continuar… En realidad el lactato no es más que un mero indicativo de la intensidad de ejercicio, y no un causante directo de la fatiga muscular como mucha gente piensa. Además, es un aliado de entrenadores y atletas, a los que tanto les gusta realizar test de lactatos (bueno, a los atletas les gusta un poco menos)… en otro post veremos por qué.

También te podría interesar…

Pensar en categorías vs pensar en espectros

Pensar en categorías vs pensar en espectros

Estoy seguro que en los cursos de entrenador te han enseñado la diferencia entre el esfuerzo aeróbico y anaeróbico. Y entre los ejercicios de fuerza máxima y los de potencia. Y entre la periodización tradicional y la contemporánea. Y entre un ejercicio básico y otro...

3 Comentarios

  1. Manu

    Para cuando el post sobre el primer umbral :)?

    Responder
  2. Pablo Arqued

    Excelente post, lo cual no me sorprende en absoluto 🙂 Y excelente web.

    Ya estoy esperando el porqué de que el lactato sea un «aliado de entrenadores y atletas».

    Responder
    • Vicente Úbeda

      Gracias Pablo! Jordan es un auténtico fenómeno y espero que sus post sean frecuentes en esta bitácora.

      Gracias por el comentario y por compartir la web. Saludos y espero que coincidamos pronto.

      Responder

Trackbacks/Pingbacks

  1. Derribando mitos sobre el lactato - [...] Derribando mitos sobre el lactato El lactato, de alguna manera u otra, forma parte de la vida de todo…
  2. NUEVOS CAMPEONES Lo que necesitas saber sobre los umbrales - NUEVOS CAMPEONES - [...] de eso. El lactato no es tu enemigo. No es el causante de tu fatiga. Sólo es un pobre…
  3. Dudas series y rodajes - Foroatletismo.com - [...] el enlace del artículo de Jordan Santos. Vicente Úbeda | Derribando mitos sobre el lactato Responder Con [...]
  4. Vicente Úbeda | ¿Qué causa el dolor muscular durante el ejercicio intenso? - [...] tiempo mi colega y colaborador Jordan Santos desterró algunos mitos sobre el lactato. Lejos de ser un elemento perjudicial…

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *